lunes, 5 de agosto de 2013

El pack ilusiona, pero hay que ir despacio












Una aureola sobre el escudo, un 10 que despierta aplausos y luce tatuajes bajo el manto santo (ayer blanco, pero azulgrana for ever, aunque haya obligaciones marketineras), un 9 de cabellera corta que mete goles en las pocas que tiene, un juvenil de nombre angelical, escurridizo y con talento de sobra, que invita a ser venerado y a ser disfrutado hoy y por un buen rato... El pack ilusiona, nos recuerda al 2001, y nos sirve para ducharnos, para sacarnos el barro de encima después de haber tenido que jugar atrincherados para no sufrir con las cuentas...

Eso quedó atrás, pero hay que ir despacio, controlando la ansiedad. Nos encontramos con un triunfo sufrido (gracias a Cauteruccio, que por el esfuerzo y oportunismo fue Caute-Lucho, si un amigo me cede el copyright). Una victoria sobre el final que equivale a llegar a tu casa después de una madrugada movida y ver descansando en la heladera una porción de pizza fría. Un manjar pasajero que te saca el hambre, pero te deja con ganas de más. Sabemos que la cosa puede ir mejor. Basta con darnos cuenta de que Angelito, el Aladino de Boedo, frotó la lámpara un segundo y gestó la previa del 2-1. Por eso, banquemos. No nos adelantemos. Hay buen pie, hay cimientos, y un DT que no será Ingeniero, pero que promete construir algo interesante. Ojalá se dé...
PD: Pasado el match, la mejor de las suertes para el grupo de ex cuervos que están en Olimpo. Fuerza.

0 comentarios:

Publicar un comentario