Tal como había dicho Lammens, hubo recibimientos dispares para Ramón Díaz y Bottinelli. El Pelado, expulsado antes del arranque, tuvo algunos aplausos y otras muestras de indiferencia. Para el defensor, muchas reprobaciones.
En la previa, durante toda la semana, mucho se había hablado de
cómo iba a recibir el público de San Lorenzo a Ramón Díaz y Jonathan
Bottinelli, ambos con pasado en el club azulgrana. Una de las voces que
había opinado en la antesala al choque en el Nuevo Gasómetro fue Matías
Lammens, presidente del club. “A Ramón lo van a recibir bien (…) A
Bottinelli no sé. Tuvo una salida conflictiva. No sé cómo lo van a
recibir. Los hinchas estamos enojados con él”.
Y el máximo dirigente del Ciclón no se equivocó. De alguna manera, su presagio se cumplió. Claro, porque Ramón contó con algunos aplausos por parte de la platea local a raíz del campeonato obtenido en 2007. Otros prefirieron por pasarlo por alto. Indiferencia.
No ocurrió lo mismo con Bottinelli. El defensor, que había jugado hasta la temporada 11/12, fue centro de reprobaciones. Continuos silbidos por parte de los cuatro sectores del Nuevo Gasómetro. Evidentemente, no le guardan un grato recuerdo.
Y el máximo dirigente del Ciclón no se equivocó. De alguna manera, su presagio se cumplió. Claro, porque Ramón contó con algunos aplausos por parte de la platea local a raíz del campeonato obtenido en 2007. Otros prefirieron por pasarlo por alto. Indiferencia.
No ocurrió lo mismo con Bottinelli. El defensor, que había jugado hasta la temporada 11/12, fue centro de reprobaciones. Continuos silbidos por parte de los cuatro sectores del Nuevo Gasómetro. Evidentemente, no le guardan un grato recuerdo.
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