Victoria azulgrana en el aranque

 Pizzi había dicho que se sentía candidato y Cauteruccio fue el responsable de ratificarlo: sin jugar del todo bien, San Lorenzo logró una buena victoria 2-1 de local ante Olimpo. El delantero uruguayo metió los dos del Ciclón, el segundo en offside.

Parecía que no, que no se le iba a dar. Que Olimpo se iba a llevar un puntazo del Nuevo Gasómetro ante uno de los candidatos de la temporada. Pero no, el entusiasmo, las ganas de darle la razón a Pizzi, que aseguró sentirse así, hicieron que San Lorenzo se llevara un resultado que fue trabajoso pero en el final merecido, más allá del gol en posición ilícita en el final. El local fue el que más propuso, el que se lo quiso llevar y terminó logrando el 2-1 cuando se venía el batacazo bahiense.

San Lorenzo fue más. Salió manejando la pelota, controlando el juego, elaborando el gol a pesar de haber sido tras varios rebotes. La media vuelta de Cauteruccio para el 1-0 fue merecido y pareció ser el despegue. Pero no. Porque en el mejor momento del local, Olimpo hilvanó una buena combinación y, tras no poder despejar (dos veces la sacó Alvarez), Nahuel Benítez, un conocido de la casa, metió el empate. Y hasta el final del primer tiempo, sorprendido por un empate inmerecido, San Lorenzo no pudo volver a comodarse.

Ya en el segundo, con Olimpo replegado y protegiendo el empate con uñas y dientes, el local buscó como pudo. Por momentos con claridad, otros con desesperación. Y casi lo aprovecha Olimpo: en una corrida de Cerutti y tras un gran centro, Pérez Guedes podría haberse llevado los tres puntos para Bahía. Hasta que, a puro entusiasmo, el locla volvió acomodarse. Y lo buscó. Y lo encontró. Y aunque Cauteruccio, que volvió a capturar un rebote, estaba en posición ilícita, Vigliano lo dio válido. Y fue victoria el candidato. Tenías razón, Pizzi.