Luego de dos días de descanso el plantel volvió al trabajo hoy en Ciudad Deportiva pensando en el River del Pelado Díaz. Pizzi podrá contar con Enzo Kalinski y espera por la recuperación de Luis Aguiar y Germán Voboril.
Los tres empates consecutivos obligan. San Lorenzo definirá este próximo domingo para qué está. Los triunfos de Independiente preocupan en el promedio y River se transformó en el rival de turno a vencer cueste lo que cueste. Y justo contra Ramón Díaz, quien ya anticipó amigables palabras para la gente de Boedo, aunque su equipo viene de tres victorias y buscará prolongar la racha el domingo próximo en el Bajo Flores.
El plantel azulgrana tuvo sus dos días de descanso luego del empate en La Plata y hoy retomó los trabajos previos al clásico. Lejos de conocer cuál será el once inicial y si el entrenador mantendrá el mismo esquema, por ahora lo que preocupa al DT es conocer el estado de sus dirigidos. Lo concreto es que Enzo Kalinski podrá volver luego de cumplir una fecha de suspensión por acumulación de amarillas. Después, resta esperar por la evolución de Luis Aguiar (distensión) y Germán Voboril (golpe en el tobillo), quienes hoy hicieron trabajos diferenciados.
Pero la duda no sólo pasa por los lesionados y el posible cambio de nombres. La incógnita se centra en el sistema, algo que pasadas tres fechas transformó a San Lorenzo en un equipo previsible y sin sorpresa. De ahí se desprenden los empates y las pocas ocasiones de gol que genera más allá de una clara posesión del balón durante gran parte de los partidos. Semana clave para Pizzi…
Fernando Vuotto
PSL
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