viernes, 29 de marzo de 2013

Habemus Pipi



Romagnoli volvió a hacer fútbol a la par de sus compañeros y Juan Antonio Pizzi contó que falta poco para que vuelva. "Tiene que agarrar ritmo. Pero tiene la ventaja de unas cualidades bárbaras y esa adaptación le puede llevar menos tiempo", contó el DT.

Es una de las lesiones que demandan un mayor tiempo de recuperación. La rotura de ligamento cruzado ya es historia. Pasaron poco más de siete meses desde el 11 de agosto de 2012. Después de 230 días, Leandro Romagnoli volvió a participar de un ensayo formal de fútbol.

Aquella tarde en Córdoba, en el partido con Belgrano sólo marcó el inicio de un parate que está cerca de concluir. Los estudios satisfactorios demostraron que el Pipi está para volver. En la práctica que dispuso Juan Antonio Pizzi se lo pudo observar bien aunque con el lógico nivel después de siete meses sin acción. "Lo vi bien, incluso mejor de lo que esperaba", confesó el entrenador en la conferencia de prensa.

De todas maneras, habrá que esperar un poquito más para volver a verlo en una cancha con la azulgrana. "Acorde a la exigencia que hay en el fútbol, seguramente va a estar considerado. Por el momento, como es lógico, si hizo la primera práctica de fútbol más o menos formal, le va a llevar unas semanas más para agarrar ritmo", explicó Pizzi, aunque resaltó: "Tiene la ventaja de unas cualidades bárbaras y esa adaptación le puede llevar menos tiempo". Olé

0 comentarios:

Publicar un comentario