Fuente: Marca.com
Uno de los equipos más grandes e históricos de Argentina, Talleres de Córdoba, cuadro del cual es Buffarini, vivió una noche inolvidable con su ascenso a la B Nacional, equivalente a la Segunda división española.
Así, el equipo cordobés está un poco más cerca del lugar que le corresponde: Primera. Los casi 60.000 espectadores que llenaron el Mario Alberto Kempes (más afluencia que en el Boca-River del fin de semana pasado) fueron determinantes para que Talleres derrotara a San Jorge por 1-0 y sellara su ascenso.
En apenas dos días se agotaron las 43.000 entradas que sacaron a la venta, un récord absoluto, algo que habla de la grandeza de Talleres. Han sido cuatro años muy duros para la T, desde que en 2009 descendió al Argentino A, la tercera categoría en el fútbol argentino, pero esta temporada, por fin, ha podido salir de ese agujero negro.
Después de terminar primero en la fase regular, a los tallarines solo les valía el primer puesto, el único que daba el ascenso, en el Undecagonal. Diez partidos contra los mejores equipos de la categoría y sólo podía triunfar uno. En la novena jornada de esta fase de ascenso, Talleres era líder con cinco puntos sobre el segundo, Deportivo Maipú, pero con un partido más.
Por lo tanto, la única combinación que daba el ascenso a Talleres era una victoria suya y un empate o derrota de Maipú en casa de Santamarina, tercer clasificado. Y se dio. Maipú cayó 1-0 y los de Arnaldo Sialle lograron el mismo resultado frente a San Jorge. Con el goleador de la T, Gonzalo Klusener, sancionado, tuvo que ser otro de los delanteros, Maxi Velasco, quien anotase el tanto que valía un ascenso.
Corría el minuto 50 cuando en una gran jugada de Gastón Bottino, Velasco aprovechaba el pase de su compañero para marcar un golazo de tacón. El Kempes enloqueció y Talleres supo aguantar ese marcador para confirmar su regreso a la categoría de plata del fútbol Argentino.
Talleres, campeón de la Copa Conmebol en 1999, podrá celebrar su centenario en la B Nacional y fijará su objetivo en regresar a Primera división, categoría que, pese a ser el equipo de Córdoba con más partidos en ella, no pisa desde el 2004, cuando quedó cerca de ganar el Clausura pero descendió en la promoción.
La alegría se disparó entre los tallarines que salieron a la calle a celebrarlo. El ascenso se vivió también en otras partes del mundo con hinchas del Matador y también entre algunos de sus ex jugadores.
Uno de los más conocidos es Javier Pastore. El jugador del PSG dejó patente en Twitter su alegría por el ascenso del equipo de su corazón: "Vamos Talleres, viejo no más. Qué alegría me das. A festejar y disfrutar este gran año!!! Dale la T, dale la T, dale la T. Hasta la muerte con vos", escribió feliz el delantero.
Después de todo el sufrimiento, Talleres logró con merecimiento regresar a la B Nacional. Uno de los más grandes del país, ya está un paso más cerca de volver a estar entre los mejores. Y como gritan los tallarines: "¡Aguante Talleres!"
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